Los bujes de lubricación hidráulica se construyen con un buje externo de latón (OT63) o con resina tecnoplástica poliamídica que tiene la ventaja de neutralizar los fenómenos de corrosión electrolítica.
Internamente los bujes están revestidos de goma nitrílica de color negro con las siguientes características:
Densidad= = 1.23
Dureza = 70/75 shore
Carga de ruptura por tracción = 2,2 Kg/mm²
Alargamiento hasta ruptura = 225%
aptas para los ejes con rotación hacia la derecha y hacia la izquierda.
La lubricación de los bujes, a través del agua que forma una película finísima entre el árbol y la goma de los cojinetes, reduce el coeficiente de fricción a valores bajísimos. Hay que evitar sin lugar a dudas un funcionamiento en seco, porque una temperatura elevada dañaría inmediatamente el buje.
Hay que evitar todo contacto de la goma con sustancias nocivas como grasa o aceite lubrificante.
El agua de circulación contribuye a evacuar el calor de la superficie interna del cojinete cuya temperatura no deberá superar nunca los 50/60ºC.
Por lo tanto, es necesario:
Dejar un espacio mínimo entre el árbol y el cojinete de goma, variable dependiendo del diámetro, de 0.10 a 0.30 mm.
No bajar con la velocidad periférica del árbol por debajo de los 0.2 m/seg.
Mantener la cantidad de agua de circulación necesaria mediante la instalación de una toma al mar independiente.