OXIGENACIÓN
Una cuenca de almacenamiento artificial sólo es funcional si se cumplen varios parámetros. Entre ellos, la oxigenación es fundamental. Esta función está garantizada por el SKIM y se deriva directamente de la microburbuja bajo presión que aporta una disolución óptima del oxígeno en el agua.
FILTRACIÓN
Es la función principal del SKIM. La eficacia del sistema es el resultado de un intercambio agua-aire por la creación de un sistema de microburbujas bajo presión con una filtración submicrónica. Así, toda la materia en suspensión, hasta los microorganismos (bacterias...) quedan atrapados en la espuma extraída (resultante del proceso Innopure). El SKIM ofrece un caudal de tratamiento de 100m3/hora. Es capaz de tratar por sí solo 7,5 toneladas de marisco en 24 horas.
CORRIENTES
Para obtener una depuración eficaz, es indispensable tratar todo el volumen de agua contenido en la balsa. Para ello, se utiliza una fuerte corriente para resuspender el material sedimentado y dirigirlo hacia el sistema de tratamiento (seguido de la eliminación). Gracias a su geometría (aspiración y descarga orientadas a 45°), el SKIM garantiza esta función
perfectamente. En algunos casos, aumentamos el caudal de corriente instalando un circulador de agua de apoyo.
MANTENIMIENTO MÍNIMO
El SKIM se caracteriza por su facilidad de mantenimiento. En efecto, al no disponer de filtros, el mantenimiento se limita a la limpieza del vaso de recuperación de espuma y del cono de plexiglás. Un suministro de agua directamente conectado al cono es suficiente para mantener el SKIM en perfecto estado de funcionamiento. El SKIM no puede obstruir ningún filtro.
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