Las ventanas verticales ayudan a que este compacto tricuerpo tenga mucho espacio para vivir en un paquete de 94 pies. Una proa alta y orgullosa y unas cubiertas laterales cerradas diseñadas específicamente para mantener a los queridos perros del propietario a bordo le dan un aspecto atractivo y nítido. En el interior, la decoración moderna y personalizada pone de relieve un conjunto de carpintería asombrosamente complejo diseñado por Patrick Knowles, que permite que el palisandro, las maderas y el pan de plata tengan el mismo protagonismo que las interesantes piezas de arte encargadas.
La restricción del número total de camarotes a tres asegura el lujo del espacio a todos los huéspedes. El skylounge/wheelhouse ofrece unas vistas espectaculares de 360 grados.
Los diseñadores de Burger aceptaron el reto de las ventanas sin marco, las curvas complejas y los planos largos y planos. Los sistemas del yate continúan con la dedicación de Burger a la constante evolución de la calidad mecánica
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